Desde Alba Car queremos darle a la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) la importancia que se merece. A pesar de la variación anual de cifras, por ejemplo en 2014, solo un 66 por ciento de los vehículos que la pasaron eran turismos de particulares, de los cuales un 20 por ciento, la quinta parte, no pasó la ITV a la primera por algún tipo de fallo. Vamos a revisar los más habituales:
Iluminación. El sistema de alumbrado es básico para la correcta visibilidad y señalización mientras se conduce. Un fallo del sistema de faros y señalización, es decir, una simple bombilla de un intermitente que no funcione es motivo de rechazo en la ITV y obliga al usuario a volverla a pasar con el fallo solucionado
Motor o transmisión. Abarca todo lo correspondiente a fugas de aceite, defectos de escape o unas emisiones superiores a lo permitido.
Frenado. Bien por falta de capacidad de una rueda, varias o el propio freno de mano, una frenada descompensada puede hacer que el vehículo se salga de la carretera en una frenada de emergencia.
Sin duda el podio de los fallos más comunes lo ocupan estos casos, por ello debemos poner especial hincapié en ellos sin descuidar otros como el acondicionamiento exterior, carrocería y chasis.
